Otra vez nos metemos en un mundo creado por Ghibli, en este caso un mundo marino lleno de colores y formas que estimulan la mente de manera explosiva.
Un niño encuentra un pececito y lo lleva a casa, lo que no sabe es q tiene un padre que hará lo que sea para rescatarla, y ahí empieza la aventura.
Los colores son alucinantes en esta película, los niños quedan hipnotizados a la pantalla quizás por los colores o por las ocurrencias de los protagonistas.
El mar es inmenso y lleno de secretos, animales ancestrales y magia.
La frase de aquí es: vive en un mundo de colores y no te arrepentirás.
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